Fiesta nacional en Polonia!! La sorprendente selección polaca se clasificó por primera vez en su historia para la final de un Mundial al imponerse por 36-33 a Dinamarca, tras dos prórrogas, en un encuentro en el que los nórdicos volvieron a evidenciar su falta de carácter en los momentos cruciales de un campeonato, tras quedarse fuera de las semis también en el último mundial y en el último europeo.
Todo lo contrario que el equipo dirigido por el grandísimo ex-jugador Bogdan Wenta, que no se arrugó en los minutos finales de la segunda prórroga, donde se decidió el partido.
En los minutos finales, la victoria polaca se cimentó en la actuación de Michal Jurecki y Rafael Kuptal, que en los partidos anteriores habían jugado un papel secundario en las rotaciones de Polonia.
Hasta entonces Polonia había dependido del poderío lanzador de los Marcin Lijewski, Tkaczycz y, sobre todo, Karol Bielecki, que machacó la portería danesa con ocho tantos.
Goles que permitieron a los polacos desde mediada la primera parte comandar el marcador con una ventaja entorno a los dos goles, que tan sólo perdieron en el tramo final del tiempo reglamentario gracias al acierto del meta Kasper Hvidt, que sin embargo, no pudo hace nada por evitar el lanzamiento de Bielecki (26-26) que condujo a la prórroga.
M. Jurecki (Foto: AFP)
Un tiempo extra muy igualado, no en vano, la primer prórroga acabó con un nuevo empate (30-30), en la que Dinamarca como ya viene siendo habitual desveló el carácter timorato que le ha hecho caer en las semifinales de los tres últimos Campeonatos de Europa, con dos inoportunas faltas en ataque de Leegaard y Madsen, que permitieron el despegue definitivo de Polonia.