MUNDO BALONMANO

El Ciudad Real se ha proclamado Campeón de Europa en Alemania tras haber derrotado al Kiel (25-31) en un auténtico partidazo. Los de Duishebaev fueron capaces de remontar el resultado adverso cosechado en el Quijote Arena (27-29) y se llevaron el título gracias a un partido muy trabajado en el que brillaron con luz propia Sterbik, Stefansson y Kallman. Los manchegos, además, han hecho historia con esta victoria ya que con este título firman una excelente temporada con un pleno absoluto. Han conseguido los cinco títulos que han disputado esta temporada -Liga, Copa del Rey, Copa Asobal, Supercopa y Liga de Campeones- .

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Para obtener este segundo título hubo que apelar a la épica, ya que los de Dujshebaev se presentaban con las bajas de Rutenka y Davis, y con Uríos y Metlicic entre algodones. Además, tuvieron que ir contra la Historia, ya que en esta competición ningún finalista había conseguido remontar a domicilio una derrota en la ida.

Y el Ciudad Real, con el lema ‘juntos podemos soñar’, se convirtió en leyenda tras conseguir esta temporada cinco títulos de cinco disputados, imponiéndose en la cancha del Kiel, el Sparkassen Arena, conocido como el ‘Infierno del Norte’, ante 11.000 espectadores que no cesaron de animar a su equipo y que al final mostraron muy malas formas ante lo apabullante del marcador

El inicio fue el soñado con ataques largos y un buen repliegue defensivo, lo que dificultaba la rapidez con la que despliega su ataque el Kiel. Ciudad Real nunca le perdió la cara al partido, que tenía perfectamente estudiado y con el transcurso de los minutos se fue consumiendo las ventajas del Ciudad Real, con un gran trabajo defensivo 5-1, con dureza, y no dejando que el balón llegase por parte de Kallman a Nikola Karabatic.

Con esto quedaba anulado el arma más importante del ataque alemán y al Kiel se le apagó la luz que sostenía el pivote sueco Ahlm y el esloveno Kavticnik, bien respaldados por Omeyer en la portería. Arpad Sterbik hizo hasta ocho paradas en este período y aburrió al ataque del Kiel, que suele marcar hasta 40 goles en cada partido.

En la reanudación, en el minuto 32 un nuevo gol de Stefansson colocó el 13-16, ampliándolo Kallman hasta los cuatro goles de diferencia, ventaja que ya describía que Ciudad Real, podía ser campeón de Europa. El Kiel intentó todo para acercarse en el marcador, hasta sacó al “tiralotodo” Zeitz, que incluso pudo perjudicar a su escuadra en su afán lanzador, pero Ciudad Real no se descompuso. En el 53´, el marcador reflejaba 22-25, pero Ciudad Real volvió a marcar muy rápido por parte de Laen y Kallman, y el equipo español se fue a 5, 22-27. El encuentro concluyó con un gol más para cada equipo y una tangana en la que varios jugadores perdieron los nervios, pero que no empaña el título obtenido.